lunes, 24 de noviembre de 2014

Cuadragésimo aniversario

Un gran Monseñor, la doctrina del Concilio calibró
Cuarenta años atrás, y dijo “No”


Monseñor Marcel Lefebvre


Comentarios Eleison
Por su Excelencia Richard Williamson
Nº 384, 22 de noviembre de 2014



            Ayer fue el 40 mo. aniversario de la histórica Declaración de Monseñor Lefebvre del 21 de Noviembre de 1974, con las razones por las cuales él y los sacerdotes y laicos siguiéndolo a él, estaban tomando su posición contra el cambio total de la Iglesia católica y la religión provocado a raíz del Segundo Concilio Vaticano. La Declaración es tan fresca hoy como lo fuera el día en que fue escrita porque la verdadera religión católica de Dios es inmutablemente verdadera, mientras que la religión Conciliar del hombre es resueltamente falsa y está ocupando Roma más que nunca.

            La Declaración consiste de diez párrafos breves, poco más de 50 líneas en total: 1/ Nosotros adherimos a la Roma católica, la Roma eterna. 2/ Rechazamos la Roma Conciliar, neo-protestante y neo-modernista. 3/ La reforma Conciliar está destruyendo la Iglesia católica y disminuyendo nuestra Fe católica, 4/ como ni siquiera un ángel del Cielo tiene derecho a hacerlo (Gálatas I, 8). 5/ Elegimos la Tradición, rechazamos las innovaciones. 6/ Todo en la Iglesia está siendo renovado de una manera opuesta a la inmemorial doctrina católica. 7/ La reforma Conciliar, proviniendo de la herejía y resultando en herejía, es inaceptable para los Católicos, entonces 8/ continuaremos a formar sacerdotes Tradicionales. 9/ Y adheriremos a la enseñanza y prácticas católicas de todos los tiempos, 10/ estando convencidos de que así haciendo permaneceremos verdaderamente Católicos fieles.

            Noten primeramente la distinción clara y afilada (1 y 2) entre Roma católica y Roma Conciliar. Ahora bien, es verdad decir que la Roma Conciliar está ocupando las estructuras de la Roma católica, pero decir que la Iglesia Conciliar es por consiguiente nada más que la Iglesia católica es tan tonto como decir que un cucú es un ruiseñor porque ocupa el nido del ruiseñor. (Y decir que Monseñor escribió de “Roma” católica y Conciliar y no de “Iglesia” católica y Conciliar es utilizar subterfugios con palabras).

            Pero, ¿cómo hace Monseñor para distinguir entre el cucú Conciliar y el ruiseñor católico? ¡Por la doctrina! El Conciliarismo es neo-Protestante y neo-modernista (2). Nuestra fe está siendo disminuida (3) en oposición a la doctrina católica (6), el Conciliarismo es herejía (7). Nosotros adherimos a la enseñanza católica (9). Y el breve resumen mencionado no da todas las referencias de Monseñor a la doctrina. La doctrina católica era la Estrella polar de su mente y acción. Es porque el hombre moderno quiere libertad para su mente y acción que él, en efecto, quiere que su mente sea reducida a papilla tras lo cual la doctrina no tiene más que una función meramente decorativa. Ya no tiene mordedura en las acciones del hombre, excepto la única desastrosa doctrina que la doctrina no tiene importancia. Y esa desastrosa doctrina tiene una mordedura total. Aquí está el porqué Monseñor está siendo reducido dentro de la Fraternidad San Pío X, que él fundó, a poco más que una mascota decorativa.

            Uno está impulsado a preguntar, ¿qué se precisará para restaurar la mordedura de la doctrina, el sentido de realidad y el amor a la verdad en Fraternidad, Iglesia y mundo? Seguramente sufrimiento, nada menos. Solyenitzin hizo una observación al efecto, que se precisará la barra de hierro de los acontecimientos para destrozar y destripar la envoltura de hormigón que el hombre moderno ha construido alrededor de su pecaminosa forma de vida. Verdaderamente, Señor ten misericordia.


Kyrie eleison.